Reserva de la Biosfera de Urdaibai
Urdaibai es un espacio natural extraordinariamente bello y variado. Su corazón es el río Oka que nace en el monte Oiz y se transforma en ría al llegar a Mundaka creando unas espectaculares marismas llenas de vida.
Es la Reserva Natural de la Biosfera más importante de la provincia de Bizkaia. Ocupa un 10 % de la misma y fue declarada Reserva Natural por la UNESCO en 1984.
Relato turístico, el compromiso de Urdaibai
La Reserva de la Biosfera de Urdaibai se ha comprometido con un modelo de turismo que se basa en la filosofía del ecoturismo. Urdaibai, como destino turístico, está dirigido a las personas que no dudan en apreciar y respetar el medio natural y cultural de los habitantes del territorio que visitan.
Entidades oficiales, empresas y habitantes de Urdaibai se responsabilizan de cuidar el territorio, participan de forma activa en la protección del mismo y apoyan un modelo equilibrado de desarrollo.
En consecuencia, parte del tejido turístico de Urdaibai se ha adherido a la Carta Europea de Turismo Sostenible (CETS) y ha creado un relato para que tu experiencia como turista beneficie a Urdaibai y a todos sus habitantes.
En Urdaibai se impulsa una convivencia equilibrada con el territorio.
Aquí tienes alguna de nuestras historias, en forma de relatos; si quieres más descarga este archivo
El corazón natural de Urdaibai
La Reserva de la Biosfera de Urdaibai, gure etxea (nuestra casa)
Huele a salitre. Descendemos hasta el mismo corazón de la Reserva: la marisma. Sin duda, es preciosa.
En una época casi la llenaron de hormigón, pero sus habitantes se revelaron, ¡no querían perder la belleza de este sitio! Y por eso se unieron y buscaron una protección internacional, Reserva de la Biosfera, un reconocimiento de la UNESCO por ser tan especial.
Ahora, Urdaibai, es la única Reserva de la Biosfera de Euskadi. Gure etxea*.
La compartimos con otros seres vivos. Y lo han hecho tan bien que Urdaibai puede presumir de conseguir un reconocimiento internacional, de los más deseados por ser un humedal de calidad (Ramsar), con especial protección hacia nosotras las aves (ZEPA)*.
Todo esto y mucho más te lo cuentan en Ekoetxea Urdaibai, en la misma Torre. Un viaje de conocimiento de la Reserva, con experiencias que te llevarán por senderos interpretados, ecosistemas cantábricos y el descubrimiento de una costa de cetáceos.
En el mundo hay muchos sitios protegidos como este. Te invitamos a viajar y que los conozcas todos. Pero no olvides presumir de haber estado en “Urdaibai Basque Reserve”.
El horizonte y sus profundidades
El Euskadi Tropical
¡Vivimos en Urdaibai hace mucho mucho tiempo! ¡No exageramos! Conocimos este mar cuando se parecía a las cálidas aguas de las Bahamas. Cuando Euskadi era Tropical
¡Qué recuerdos! Buceábamos entre arrecifes, entre peces de colores.
Nos presentamos, somos las Lamias (Sirenas de la mitología vasca, con pies de pato), las eternas señoras de la mar.
Con el paso de los milenios vimos cómo los arrecifes se convertían en acantilados, playas y montañas. ¡Ojalá los hubierais visto! Bueno, sí que podéis ver fósiles de los antiguos arrecifes en la cala Ondartzape. Y también subir al mirador de Ogoño, que en su día fue un mega arrecife. ¡Nuestro preferido! Tiene como 10 millones de años.
¡Qué miedo pasamos con las erupciones submarinas! Pero dejaron rocas verdes a su paso en San Antonio y la playa de Laga ¿Y cuando los meteoritos impactaron la tierra?
En Kanalape hay restos de los increíbles seres de aquel entonces.
Bueno que nos enrollamos. Como íbamos diciendo nuestras aguas cambiaron, se volvieron frías. Más fuertes y peligrosas. ¡Imaginad! Los barcos se estrellaban contra las rocas intentando pescar ballenas, la madera crujía contra el flysch del cabo Matxitxako.
Pero a nosotras nos encantó el cambio.
Con el oleaje y el viento del Cantábrico surgieron infinidad de cuevas y Urdaibai se convirtió en un queso gruyere. Perfecta para esconderse.
¿Por qué nos escondimos? Por vuestro miedo a lo desconocido. Ya los arrantzales (pescadores) inventaban historias de que queríamos ahogarlos. ¡Menuda reputación nos ha quedado!
En fin…Ahora que ya no creeis en nosotras la mar es vuestro lugar de recreo. Nadais, bailais con las olas, exploráis el fondo marino y surcáis la mar solo para ver animales.
Pero no os olvidéis de lo que os hemos contado, este mar se puede vivir de otras muchas formas como estas joyas geológicas te enseñan.
El paisaje en movimiento
Paisaje de acuarela, un escenario muy vivo
Es otoño, ¡es momento de ir al bosque en Urdaibai! Este año he elegido el robledal de Aingerubide.
Saco mi paleta y mezclo amarillos, ocres y marrones. Llevo pintando en la Reserva desde hace tiempo. Cuando pinto, no miro un simple escenario bonito. Yo veo mucho más.
Me gusta explorar qué esconde: el olor a la tierra húmeda, el sonido del viento en las hojas de los árboles, el río pasar y el grito de los jabalíes con sus crías. Luego cuando el cuadro esté terminado, ya en mi casa, volveré a acordarme de estas sensaciones.
La verdad, me gustaría poder pintar más robledales… pero cada vez encuentro menos.
Paseo entre encinares cantábricos, siempre verde intenso, la vegetación trepa por los árboles y enmaraña el bosque. Son densos y me gusta perderme por sus senderos que conducen a la cumbre de San Pedro Atxarre o de San Miguel de Ereñozar. Llámame loca pero a mi ¡me huelen a setas! Están escondidas por ahí en alguna parte.
Más tarde me acercaré a la marisma. En esta época está llena de pájaros y elijo el blanco para pintar sus plumas. Es el color perfecto para reflexionar y sentir paz. A eso se suma su canturreo y me siento tan bien…
En primavera utilizo mucho el verde savia, me chifla como salpica la campiña atlántica y sus baserris, prados y huertas. Mientras pinto me acompaña el ronroneo de las máquinas trabajando la tierra. Mezclo diferentes tonos para las manzanas, las uvas y las flores que trepan por las paredes. El olor a hierba, fruta e animales invade el ambiente. Si puedo hablo con la gente de los caseríos para saber qué tal ha ido la cosecha de ese año.
Me gusta subir a las montañas. Siempre voy andando, suelo elegir diferentes rutas, voy dejando el mar atrás. Aupa!*, saludo a los paisanos y paisanas que me voy cruzando.
Desde las alturas miro tierra adentro, puedo mezclar todos los colores de mi paleta. Pero lo que más me gusta es cerrar los ojos. ¡Escucha!
Los testigos de nuestra cultura y tradiciones
El Jauntxo de la Torre, una vuelta por el interior
Las historias suelen comenzar con “Érase una vez”, este no es el caso, no tiene cabida en esta historia de tiempos pasados y oscuros. El pueblo estaba furioso por el hambre y ahogado por los impuestos. Los nobles inmersos en luchas de poder para mantener sus viejos privilegios y demostrar la superioridad de su linaje. Levantaron altos muros para defenderse de clanes rivales. Y así convirtieron sus palacios en Torres. Urdaibai bullía como el aceite hirviendo.
El Jauntxo* del clan Arteaga lo sabía y aún así partió a dar su paseo a caballo. Sintió un pequeño escalofrío cuando salió de los dos metros de grosor de su fortaleza octogonal.
Pero pronto dejó atrás la Torre Montalbán en lo alto de la colina. Desde ese punto de Mendata gozaba de una vista privilegiada del camino a Gernika que atravesaba sus tierras. Imperaba en él la necesidad de controlar cómo iban sus negocios y rentas.
Además, él era el jefe de uno de los clanes más poderosos de Urdaibai, no podía plegarse al miedo. Se debía a su familia, como siempre le recordaba el escudo de la puerta principal. Suya es la obligación de proteger a sus allegados.
Se adentra en el bosque. Lo rodean laureles, avellanos, robles y fresnos. Le recibe el río Golako, que atraviesa por el puente de Artzubi. Se va adentrando cuando se cruza con mercaderes que se dirigen a Gernika, llevan sus carros cargados. Madarikatuak*! La villa y el comercio amenazan su forma de vida, el control con la agricultura local que había mantenido hasta entonces.
Su primera parada es su ferrería en Arratzu. Pero antes de llegar atraviesa tierras de labranza y huertas. Se incomoda, los labradores le miran de refilón y saludan cabizbajos.
Su mirada, segas*, azadas y horcas nunca le habían parecido tan afiladas. La hambruna y la peste ha hecho que muchos hayan muerto. Y algunos traidores se han ido a Gernika, afectando a sus rentas. ¡Así pues, no piensa bajarlas! Azuza al caballo para que apriete el paso.
Por fin llega a la Ferrería de Olazarra, habla con su capataz y revisa las cuentas del mes.
Antes de volver a casa se desvía a la iglesia de Santo Tomás que domina el río. La Casa de Arteaga* es su patrona y le tiene especial cariño. Saluda al fraile que está rodeado de peregrinos que siguen el Camino de Santiago de la costa. Ya hablará otro día con él del problema con el diezmo, por su honor que los fieles iban a entregar la cantidad de trigo y ganado completa.
El camino de nuestra historia
Arrola! Arrola!
Empieza a amanecer. La luz se refleja en las altas murallas que rodean el poblado.
Anoche llovió y brillan con colores anaranjados. Ella ya está despierta. Como todas las mañanas le gusta ver cómo se ilumina el valle. Es joven y ágil, ha trepado los seis metros que separan la muralla del suelo. Es su sitio secreto, el que le enseñó su padre.
La cumbre de la cordillera de Gastiburu, su hogar, tiene una vista impresionante. Le abruma, y por un momento pierde el equilibrio. Mira hacia abajo, el foso y la valla de palos que rodea la muralla le devuelven la mirada, amenazantes. Piensa en los enemigos que podrían caer ahí y casi siente pena por ellos. Y luego están los fieros guardias de la muralla… Su aldea es poderosa.
Arrola! Arrola!
El eco se extiende en el silencio de la mañana. Su ama* la está llamando. Baja con destreza, aprovechando los huecos entre las piedras. Corre por los caminos del poblado, algo embarrados, los estrechos tejados de paja gotean, el agua resbala aún por ellos.
Deja atrás hileras e hileras de cabañas estrechas y alargadas. El humo y la gente empieza a salir de ellas. Y ya no volverán a entrar hasta bien entrada la noche. La vida se hace fuera, a la intemperie. Llega a la cabaña familiar con la lengua fuera, su madre le mira con desaprobación y le lanza una cesta.
¡Todas la mañanas lo mismo! Vamos, no hay tiempo que perder.
Parece que hoy se dirigen al basoa* a recolectar bayas, raíces, hierbas, setas…¡Qué suerte la suya! Se cruzan con vecinas y amigos en su camino a una de las tres puertas de la muralla. Algunos se dirigen a las minas, otros a comerciar con los poblados vecinos o a cuidar de sus cultivos y animales.
Su ama para, negocia un trueque. Ha visto al hijo de la curandera con sus herramientas de pesca, ¡y no hay nada que más le guste! Iría ella misma, pero tardaría todo el día en bajar a la ría.
Se acercan a la salida. Esperan a que un grupo de ovejas, cerdos y vacas pase en un cruce. Arrola piensa en su aita*. Como buen pastor estará ya cuidando de su rebaño. No lo verá hasta que caiga la tarde y suban a la muralla para ver la puesta del sol.
Un poco más de información sobre Urdaibai
Por Carretera
Por Bermeo: BI631 Bilbao-Mungia-Bermeo / BI2101 Bakio-Bermeo
Por Gernika-Lumo: BI-635 Amorebieta-Gernika (autopista hasta Amorebieta)
Por Mungia: BI 2121 Mungia-Gernika
Por Lekeitio: BI-3238 Lekeitio-Gernika
En Autobús
A3514 Bilbao – Amorebieta Etxano – Gernika-Lumo
A3519 Gernika-Lumo – Mungia
A3515 Bilbao – Amorebieta Etxano – Gernika-Lumo – Bermeo,
A3513 Bilbao – Hospital Galdakao – Gernika-Lumo – Lekeitio
A3523 Bilbao – Hospital Galdakao – Gernika-Lumo – Aulestia – Lekeitio
A3524 Bermeo – Bakio
A3527 Bilbao – Mungia – Bermeo
En Tren
Recorre la margen izquierda de Urdaibai, un recorrido de gran belleza en el que no podrás despegar la mirada del paisaje.
Línea E4: Matiko-Bilbao > Bermeo
Distancias Kilométricas
De Bilbao, 33 kms.
Aeropuerto, 35 kms.
14 Kms de la autopista (salida en Amorebieta)
105 kms. de San Sebastian.
70 kms. de Vitoria-Gasteiz.
120 Kms. de Hendaia (Francia)
140 Kms. de Baiona (Francia)
Gernika – Lumo ⇒ Visita Guiada
Gernika-Lumo es una villa con encanto propio, con una historia única, con un patrimonio digno de destacar, con una sabrosa gastronomía y con un entorno natural que la convierten en uno de los municipios con más encanto de Urdaibai, Bizkaia y Euskadi.
Mundaka ⇒ Visita Guiada
Bonito pueblo pesquero de gran interés turístico, es mundialmente conocido por ser un lugar ideal, y único, para la práctica del surf. Puedes perderte por sus callejuelas, disfrutar del ambiente marinero del puerto, perder la mirada en las fantásticas vistas desde Portuondo o desde el mirador de la Atalaya. También puedes disfrutar de un relajado paseo hasta la ermita Santa Catalina y disfrutar de este paraje de gran belleza.
Bermeo ⇒ Visita Guiada
Bermeo es reconocido, desde siempre, como uno de los puertos pesqueros de bajura más importantes de la Cornisa Cantábrica. Podemos encontrar documentación escrita sobre Bermeo del siglo XI, pero la fecha de su fundación es del siglo XIII. Entre el sorprendente mirador de Baztarre y el mirador del Torrontero , podemos disfrutar de un curioso mural que representa el paisaje del pueblo antes de su construcción como villa.
Errigoitia
Es un municipio eminentemente rural, cuyo origen va unido a la anteiglesia de Santa María de Idibalzaga. Esta parroquia, situada en el barrio Eleizalde, compone un bonito conjunto con el humilladero y las casas que le rodean. Errigoiti cuenta además con varias ermitas repartidas por sus barrios, y con un típico paisaje de interior y pastoral.
Kortezubi
Kortezubi es un municipio que conserva un extenso patrimonio paisajístico, ecológico y cultural. Fue elegido por nuestros antepasados como hogar y morada en tiempos prehistóricos, atraídos sin duda, por la abundancia de recursos y la confortabilidad de sus numerosas cuevas. Prueba de ello es la Cueva de Santimamiñe. Goza de un paisaje abierto hacia la ría y recogido en los valles interiores, con paseos y rutas que te sumergen en un paisaje excepcional.
Murueta
Destacan en Murueta sus recursos naturales y patrimoniales, entre hermosos caseríos y espectaculares vistas de las marismas de Urdaibai. Está situado junto a la carretera que une los municipios de Gernika y Bermeo, y destaca en Murueta su típico casco urbano, con la Iglesia, el frontón y la plaza del pueblo.
Elantxobe
El encanto de un pueblo pesquero, genuino y singular. Así es Elantxobe. Está construido sobre una ladera que mira al mar, al abrigo del Cabo Ogoño, con edificios escalonados y calles estrechas e inclinadas que te llevan hasta el puerto.
Elantxobe tiene su origen en un reducido núcleo de pescadores que existía ya a principios del S.XVI y que fue aumentando con gentes de los pueblos vecinos. Pero no fue hasta 1833 cuando se desanexionó del municipio de Ibarrangelua.
Ereño
Es famoso por su mármol, y ya en el siglo 1d.C los romanos explotaban las canteras, hoy ya en desuso. Hay referencias literarias que calificaban Ereño como “Capital de la ruta del mármol”, material que se encuentra en multitud de edificios de Urdaibai, y también al otro del océano.
Según datos del historiador Tomás de Goikolea, Ereño se constituyó en el siglo IX, y los habitantes del municipio pudieran ser descendientes directos de aquellos moradores de la cueva de Santimamiñe.
Forua
Forua es un municipio de la margen izquierda de la ría, vecino de Gernika-Lumo, de hecho, podrás moverte caminando entre uno y otro a través de un tranquilo y seguro paseo. En Forua se han encontrado indicios de ocupación humana desde la prehistoria y cuenta, además, con uno de los escasos yacimientos romanos conocidos en el Cantábrico Oriental. También la parroquia de San Martín de Tours esconde vestigios desde inicios del último milenio. La naturaleza también forma parte de la esencia de Forua, con importantes recursos naturales y relajantes senderos.
Mendata
Un pueblo con arraigo en la cultura popular y en la gran variedad de su folklore, situado en la parte alta de Urdaibai, a 7km de Gernika-Lumo. Formado por cuatro barrios. Elejalde, Albiz, Marmiz y Olabe, su bello entorno natural ofrece numerosos itinerarios para realizar tanto a pie como en bicicleta. A pocos kilómetros de centro urbano, se encuentra el denominado Balcón de Bizkaia.
Muxika
Se encuentra entre los macizos de Oiz y Bizkargi, y es el municipio más extenso de toda la comarca. Sus barrios, dispersos entre verdes montes guardan un valioso patrimonio cultural e histórico. Vale la pena visitar el pequeño barrio de Unda, por sus caseríos medievales. En San Román está la emblemática casa-torre de Muxika, del siglo XVI y la bella ermita de San Román, edificio románico y magnífico ejemplo de la arquitectura religiosa rural. En Maguna, Maume, Gorozika o Ajuria, destaca el magnífico entorno natural y rural.
Ea
Fundado por los arrantzales de Bedarona, Ereño y Natxitua, Ea es un pueblo rural que mantiene su espíritu pesquero. Conforman el municipio el casco urbano de Ea y los barrios, Natxitua, Bedarona y Angelutxu, cada uno con sus características y personalidad completan el espléndido y diverso paisaje.
Arratzu
Municipio de marcado carácter rural, ocupa una zona montañosa de valles angostos. Está dividido por barrios, y se sitúa en la orilla derecha del río Golako. En otro tiempo hubo hasta cinco ferrerías, que no pudieron subsistir con la aparición de los grandes establecimientos siderúrgicos. Y la Edad Media queda atestiguada por las numerosas casas armeras y solares aquí levantadas, entre las que destacan, la casa torre de Zubiaur y la torre de Montalban.
Busturia
Un pueblo con playa y montaña, y con una amplia red de caminos por los que practicar senderismo en un entorno natural excepcional. Se encuentra en la orilla de la ría de Mundaka-Gernika, un precioso municipio de algo más de 1.600 habitantes distribuidos en cinco barrios.
Morga
Está en un bello entorno montañoso y forma parte de la Ruta Jacobea y de lugares juraderos de Bizkaia. Es habitual ver a los peregrinos caminando por sus senderos. Morga está compuesta por barrios salpicados de caseríos, y numerosas casas solares y armeras, que nos remontan a la Edad Media y a la lucha entre linajes.
Nabarniz
Se sitúa a los pies del monte Iluntzar, y la altitud media del municipio es de 360m, el más alto de la comarca. A partir del siglo X se fueron configurando los barrios tal y como ahora los conocemos, cada uno en torno a su propia ermita: el barrio Ikazurieta con su ermita de San Cristobal, el barrio Uribarri en torno a la ermita de San Miguel, la ermita de San Gregorio en el barrio Merika, la de Santiago en el barrio Lekerika y finalmente el barrio Elexalde en torno a la iglesia de Santa María de Gorostiza. La gastronomía marca también la historia de Nabarniz, con su especialidad en alubias rojas, y sobre todo, la menestra de verduras. Disfrúta de estas especialidades en los restaurantes del pueblo.
Ajangiz
Se encuentra a 3km de Gernika, en la falda de una colina que le convierte en mirador natural de Gernika y de la vega del rio Oka. Es un municipio esencialmente rural, con una monumental Iglesia en el barrio Mendieta, núcleo central del pueblo, en cuyo entorno se encuentra también la casa cural, el ayuntamiento, de estilo neoclásico.
En el año 1947 Ajangiz pasó a pertenecer a Gernika, hasta que en 1987 se formó la comisión de desanexión. Que finalmente se produjo en el año 1991, convirtiéndose a partir de esta fecha en municipio con entidad propia.
Ibarrangelu
Ibarrangelu acoge importantes recursos naturales, como las playas de Laida y Laga o San Pedro de Atxarre, y un gran patrimonio histórico, con la bóveda de San Andrés como principal ejemplo. Senderos que transcurren por en espléndido paisaje y barrios rurales llenos de encanto forman parte de este pueblo.
Gautegiz – Arteaga
Su historia de molinos y ferrerías se torna glamurosa cuando Napoleón III construye un castillo para su esposa Eugenia de Montijo, junto a la marisma. El castillo es, junto con Urdaibai Bird Center, su emblema turístico, pero por su ubicación estratégica, con la marisma como escenario de un paisaje único, cerca de la histórica villa foral de Gernika-Lumo y a pocos kilómetros de algunas de las playas más importantes de Bizkaia, Gautegiz Arteaga cuenta con muchos e interesantes recursos naturales.
Sukarrieta
Pueblo costero, vecino de Mundaka, y uno de los pioneros en impulsar el turismo en Urdaibai. El municipio de Sukarrieta es uno de los enclaves más antiguos del territorio histórico de Bizkaia, y su población se multiplica durante los meses de verano con la llegada de los veraneantes. Tranquilo y con todos los servicios necesarios para una estancia agradable, en Sukarrieta destacan la Isla de Txatxarramendi, el parque de la marisma, la ensenada de Portuondo, y la Iglesia de Legendika. El bello entorno de Sukarrieta ofrece al visitante la posibilidad de dar largos paseos por sus senderos.
Carnavales de Mundaka: “Aratusteak”
Son unos carnavales únicos y singulares, también denominados Aratuste. Hombres y mujeres toman las calles. Ellos, los Atorrak, por la mañana y vestidos con falda, blusón y pantalones blancos, y una funda a modo de capucha y pañuelo de colores; y ellas, las lamiak, por la tarde, vestidas de negro y con el rostro maquillado de blanco. La música es otra de las grandes protagonistas, porque tanto los atorrak como las lamiak animan el ambiente con alegres melodías.
Una tradición ancestral, en la que es obligatorio divertirse, y que en Mundaka se vive con devoción.
Danzas Vascas
El País Vasco es un pueblo de gran personalidad, con costumbres y tradiciones fuertemente arraigadas y una cultura con diferentes manifestaciones, una de ellas, las danzas vascas. Son la esencia de nuestro folclore y están presentes en todas las fiestas y eventos importantes de nuestros pueblos. Algunos bailes son saludos y reverencias, otros son propios de un ambiente festivo y de romería.
Las referencias más antiguas las encontramos en el S. XVIII, pero con el tiempo muchos bailes se han ido actualizando, y también algunos han desaparecido. Pero la tradición se mantiene fuerte por el apego de los vascos a su cultura, con un rico y vistoso repertorio tradicional: el aurresku, ezpata dantzak, arku dantza, zinta dantza, el baile de la era, carnaval de lantz, fandango, arin-arin, la jota…
Madalenas
Se celebra el 22 de julio, y es una cita que todos los vecinos y vecinas de Urdaibai apuntan en su agenda. Una festividad de tradición marinera que celebran conjuntamente los municipios de Bermeo, Elantxobe y Mundaka y que tiene como origen una curiosa historia.
En un ambiente festivo y de hermanamiento entre las localidades de Bermeo, Mundaka y Elantxobe, el pueblo de Bermeo confirma la titularidad sobre la isla en una tradicional procesión marinera , en la que el alcalde/sa de Bermeo lanza una teja al mar mientras, en una reafirmación de la posesión de la isla, proclama: “hasta aquí llegan las goteras de Bermeo” (“honaino heltzen dira Bermeoko itxuginak“, en euskera).
Una fiesta que comienza desde muy tempano, donde reina el buen ambiente, la música y el buen humor. Unos deciden celebrarlo en Bermeo, otros en Elantxobe, y quienes tienen embarcación, tienen la suerte de unirse al cortejo oficial y disfrutar de una animada travesía. Es característico también vestir de azul, con prendas de mahon, vestimenta típica de nuestros arrantzales.
Marijesiak
Antigua tradición que aún se mantiene en varios municipios de Urdaibai y que está unida a la Navidad: consiste en salir a cantar por las calles, de madrugada, durante los nueve días previos al 25 de diciembre. Son coplas en euskera sobre el misterio de la navidad y el nacimiento de Jesús. Gautegiz Arteaga, Ea, Ibarrangelu, Muxika o Gernika son los pueblos que conservan esta tradición. En muchas ocasiones son los niños quienes la mantienen, a cambio de una “limosna” el último día de ronda.
En Gernika-Lumo los marijeses gozan de una gran tradición y expectación. Salen a cantar a las 4 de la madrugada, voces adultas que endulzan el sueño de quienes descansan en sus hogares. Lo recaudado el último día es siempre para la Residencia de ancianos.
Se cree que el origen está en una pieza teatral, que con el tiempo se convirtió en una ronda callejera.
Noche de San Juan
Siente el hechizo de Urdaibai en esta noche especial, diferente y mágica, en la que el fuego tiene un importante protagonismo, purgar todos nuestros pecados. Si a todo ello le sumamos un entorno idílico y místico, la noche de San Juan alcanza niveles supraterrenales. Muchos municipios de Urdaibai cumplen con los rituales propios de la noche de San Juan para dar la bienvenida al verano. En Mundaka, al anochecer, una kalejira y la “sorgin dantza” son preludio del inevitable final de la bruja, su quema en la atalaya, en una gran fogata. Una noche en la que el fuego, el mar y la bella Mundaka se funden para crear una atmósfera de espiritualidad. También en Bermeo se vive con devoción esta noche de San Juan. El ambiente comienza a caldearse desde la tarde, con una kalejira por las principales calles, hasta llegar a Goiko plaza, donde sonarán los compases de los bailes y cánticos previos al encendido. Al día siguiente, la festividad del santo se traslada a San Juan de Gaztelugatxe, con el peregrinaje hasta la singular ermita, donde se celebran varias misas desde primera hora y a donde muchos acuden en cumplimiento de promesas realizadas o para dar las gracias al santo.
Surf
Urdaibai goza de excepcionales condiciones para la práctica del surf. Mundaka y su ola izquierda son mundialmente conocidos, y una referencia en la práctica de este deporte. Pero también en otros lugares, como en las playas de Laida y Laga podrás disfrutar de esta actividad.
Dicen quienes practican surf que las sensaciones sobre una tabla son indescriptibles. Y si a ello sumamos un lugar paradisíaco como es Urdaibai, las sensaciones se multiplican. Mundaka, y las playas de Laida y Laga son lugares perfectos para la práctica de este deporte. Para los iniciados, mejor en Laida, para los expertos, la ola izquierda de Mundaka, y en Laga, depende de las previsiones.
Actividades acuáticas
Las playas de Urdaibai ofrecen multitud de oportunidades de pasarlo bien, y una de ellas son las actividades acuáticas. Deporte al aire libre, con todas las garantías de seguridad y para todos los públicos. Rutas en piragua, paddle surf, cursos de buceo, multiaventura, paseos en barco… Kayak, Stand Up Paddle, …
Senderismo
La red de senderos de Urdaibai alberga tesoros de gran valor cultural, paisajístico y etnográfico. Misteriosas ermitas, imponentes caseríos, reconditos parajes y un paisaje natural espectacular sorprenden al caminante a cada paso.
Pelota Vasca: “Jai-Alai”
Deporte mundialmente conocido que se caracteriza por su destreza y velocidad, de hecho es el deporte de pelota más rápido del mundo. Parece un juego sencillo, se trata de lanzar la pelota con una cesta. Pero lo cierto es que es necesario una gran habilidad y fuerza para practicarlo.
Se juega en un frontón, y en Gernika-Lumo se encuentra el frontón de cesta-punta en activo más grande del mundo. Un “templo” de la cesta-punta, construido por Secundino Zuazo, autor de reconocido prestigio en la arquitectura contemporánea.
Vive tu propia experiencia como “puntista” y siente el tacto de la cesta en tu mano.
Bicicleta: Bike Reserve
Ya sea por carretera o por montaña, en Urdaibai tienes un sin fin de rutas para hacer kilómetros con todas las satisfacciones que tiene de estar rodeado de unas vistas excepcionales. Llanear, rodar entre árboles o escalar cimas de 1ª categoría no te dejarán indiferente.
Deporte Rural
Tiene su origen en el trabajo del medio rural y en el espíritu competitivo de los vascos. Labores que se realizaban habitualmente en los caseríos se convirtieron en desafíos entre vecinos o para ver quien tenía mayor habilidad o lo realizaba en el menor tiempo. Por eso es más habitual que esta tradición se mantenga más en pueblos que en ciudades.
Corte de troncos, levantamiento de piedra, pelota vasca, sokatira, arrastre de piedra por bueyes, barrenadores, segadores, recogida de mazorcas, regatas…Son deportes que requieren de gran fuerza física y resistencia. De entre todos ellos, los que gozan de mayor popularidad y seguidores en la actualidad son la pelota a mano, y las regatas, con un gran número de seguidores, de todas las edades.
Unido al deporte rural están también las apuestas. Es habitual que se realicen apuestas en los diferentes enfrentamientos del deporte rural, entre el público y entre los propios protagonistas.
Escalada
En las verticales paredes del peñón de Ogoño tienes la mejor oportunidad de poner a prueba tus habilidades y toda tu fuerza. Haz rappel y muévete por las paredes a más de 200 metros de altura.
San Juan de Gaztelugatze
Santa Katalina
Alejado del núcleo de población, y sobre un pequeño promontorio junto al mar, se encuentra este lugar privilegiado por la belleza del entorno y su situación estratégica. Se trata de una ermita de gran altura y volumen. El entorno ha sido convertido en una agradable área de esparcimiento.
Atxapunte
Sobre los Viñedos de Txakoli de Amunategi y los barrios de San Bartolomé y Axpe de Busturia, a 197 metros de altura tenemos este montículo que nos ofrece una visión 360º desde su cima con unas vistas a las marismas y a la desembocadura de la ría totalmente imperdible. Aunque su acceso no es fácil, con un poco de esfuerzo merece la pena su coronación.
Cabo Matxitxako
Se trata del punto más nórdico de la costa cantábrica. Es un excelente mirador sobre San Juan de Gaztelugatxe y la costa vasca. En él se hallan dos faros: el antiguo y el más moderno. El primer faro fue construido en 1852 y estuvo en marcha hasta 1909, cuando se inauguró el que funciona en la actualidad. En torno a los restos de este faro se ha instalado un punto de observación de cetáceos y aves marinas.
Balcón de Bizkaia
Mirador desde donde disfrutar del paisaje más montañoso de la cuenca de Urdaibai. Situado en las laderas del Oiz, el balcón de Bizkaia es un enclave emblemático desde donde se divisa la masa forestal de la zona en toda su amplitud. Existe una leyenda que cuenta que este lugar era un lugar donde las brujas se reunían cuando caía la noche.
Ogoño Buru
Este peñón, en cuya ladera se asienta el pintoresco pueblo de Elantxobe, es una atalaya natural que nos regala vertiginosas panorámicas sobre la playa de Laga, Izaro, Bermeo y nuestro mar Cantábrico. A esta impresionante masa caliza de paredes verticales se asciende de manera sencilla desde Elantxobe (2km). Un paseo entre el bosque de encinar Cantábrico.
San Miguel de Ereñozar
Sobre el pueblo de Ereño, en un paraje privilegiado de inmejorables vistas, entre los vestigios de sus murallas, su paisaje y sus leyendas, se encuentra la “cima medieval” de San Miguel de Ereñozar. La ermita es visible desde casi todos los rincones de la ría de Gernika, y desde la cima de Ereñozar es posible distinguir los montes de Durangaldea.
San Miguel de Altamira
En el municipio de Morga encontramos este mirador con vistas en verde, a valles con caseríos diseminados por el paisaje; al azul del mar Cantábrico; y al monte Sollube, uno de los montes bocineros desde los cuales se llamaba antiguamente a juntas para determinar las leyes. Junto al mirador está el ermita de San Miguel; según la tradición es de enorme antigüedad, aunque la construcción actual no guarda nada de la originaria.Se toma la carretera comarcal BI- 2121 Gernika-Morga, una vez se llega al alto de Gerekiz se toma dirección al barrio de Andra Mari. Allí se toma a mano derecha, una carretera vecinal asfaltada que lleva al barrio de Oñarte y Meakaur, justo después de área recreativa de Duo. Se atraviesa el bello barrio de Oñarte siguiendo el camino hasta llegar al mirador de Altamira.
San Pedro Atxarre
Valles y marisma se extienden a los pies de San Pedro de Atxarre, con una panorámica única. La ermita del siglo XV, que adorna la cima del monte Atxarre de Ibarrangelu, domina el paisaje cubierto por el denso encinar cantábrico y la marisma de Urdaibai, ambas señas de identidad de la reserva.. Puedes llegar desde el barrio Akorda (500 metros antes de llegar al barrio) o desde Kanala (subir a la ermita de S. Martin). En el camino, te acompañan antiguas leyendas de akelarres y milagros religiosos.
Bizkaigane
Muy cerca del barrio Metxikas de Errigoiti, coronado por la ermita Santakrutze, esta pequeña cumbre ofrece un inmenso paisaje sobre Bizkaia. Rodeada de montes, la ermita ha vivido, entre leyendas, importantes episodios de nuestra historia. Aita Barandiaran recoge historias del lugar, donde se encuentran restos de una estela y un sarcófago, que ‘apuntan’ una necrópolis medieval. Puedes llegar hasta aquí en vehículo, y también disfrutando de bonitos paseos.
Laida
Laga
Laidatxu
San Antonio
Kanala
Aritxatxu
Toña
Ea
Los Arenales
Bulliciosas o solitarias, grandes arenales o pequeñas y recogidas playas. Son muchas y variadas las playas de Urdaibai, todas con el encanto del Cantábrico, bien para disfrutar de una tranquila jornada al sol o para un día de aventuras acuáticas. Fuera de época estival son también un fantástico lugar para disfrutar del bravo sonido del mar, para pasear inmersos en la naturaleza más bella, o para disfrutar de la soledad.
La Marisma
En Urdaibai, hay en la actualidad unas 600 Ha. de marismas, que presentan un amplio lecho inundable. La acción de las mareas, dota a éste ecosistema de un componente dinámico con gran atractivo para su observación. Es un paisaje que cambia cada pocas horas. La marisma de Urdaibai, es un ecosistema en el que se funden como en pocos lugares, la influencia de la naturaleza con las prácticas seculares del hombre. En un entorno que a primera vista parece virgen, la mirada experta descubre un entramado de antiguos diques de piedra y barro (munas), estructuras para compuertas ya en desuso, zonas semidesecadas para pastos (polders) y canalizaciones para antiguos molinos, que construidas con sabiduría y respeto al medio, han conformado un paisaje con multitud de matices.
La Campiña y el Bosque Atlántico
La campiña es el entorno natural de caseríos y núcleos habitados, constituido por un mosaico de prados, cultivos y pequeñas formaciones boscosas adyacentes. Su formación se debe a la explotación agrícola y ganadera del territorio, es el ecosistema que ha sido intervenido directamente por el ser humano, un paisaje diverso y armónico, con presencia de caseríos vascos tradicionales de relevancia histórica y económica, rodeados de cultivos, diversas especies de animales, pastizales y plantaciones forestales, que la dotan de esa especial singularidad y riqueza que lo convierten en uno de los paisajes más representativos del País Vasco.
Encinar Cantábrico
Es uno de los ecosistemas más representativos de Urdaibai, una de sus señas de identidad: marca fuertemente su paisaje, y condiciona su fauna y usos. Son bosques importantes desde el punto de vista ecológico y biogeográfico, con especies vegetales que deben hacer frente a la escasez de agua (especialmente en verano), que desarrollan extensas raíces y hojas pequeñas y coriáceas capaces de retener la humedad, evitando, mediante la regulación de sus estomas la pérdida de agua. Los encinares cantábricos de Urdaibai acogen una fauna diversa. Su estructura cerrada y espesa hace de esta masa forestal un refugio protegido para muchas especies animales. Las masas más representativas de encinar cantábrico en Busturialdea son las que se extienden desde el cabo Ogoño hasta Ereñozar.
Izaro
Txatxarramendi
Akatz
Sandindere
Gernika
Mundaka
Bermeo